MABON, CUANDO LOS BOSQUES SE DESNUDABAN ANTE EL EQUINOCCIO DE OTOÑO

- ¿Quieres una manzana? - dijo, mientras se sentaba junto al fuego.

- Si!! Las de tu manzano siempre están muy dulces. Cuéntame el secreto, abuelo.

- La Naturaleza y la tierra guardan el secreto y en Mabon nos regalan manzanas. Aunque ahora ya no parece otoño. – dijo con mirada triste - Ya casi no reconozco esta tierra, y casi he olvidado como era todo... Antes en otoño celebrábamos la segunda cosecha más del año. Hacíamos compota y tarta de manzanas, recogíamos varas de sauce y hacíamos cestos y canastas, hacíamos conservas para el invierno , espantapájaros para las huertas... Celebrábamos que el verano llegaba a su fin, y así nos preparábamos para descansar y coger fuerzas durante el otoño y el invierno. Disfrutábamos del hogar, de la calma y de nuestros bosques...

- Pero ya no reconozco nuestro bosque. En otoño me descalzaba y sonreía mientras mis pies pisaban el suelo fresco y mullido por las miles de hojas que caían de los árboles. Los árboles se desprendían de ellas para entrar en el reposo del invierno. Pero ya hace tiempo que no veo esa alfombra. Nuestro bosque ya solo está lleno de eucaliptos y bajo ellos solo crecen tojos y helechos. Ya casi no veo espinos blancos con sus bonitas bayas rojas con las que ayudar a nuestra sangre y corazón. Ya no veo estramonio, temido y usado para aliviar nuestros pulmones y dolor reumático. Los viejos sauces ya no están en el camino para calmar nuestro dolor y dejarnos acariciar sus suaves yemas en primavera. Ya no hay inmensos campos de manzanilla, malva, hipérico, lavanda... La hermosa y tímida carrasquilla azul lucha por sobrevivir entre los tojos que la asfixian. No veo alisos meciendo sus hojas a la orilla del río. Las abejas no tienen brezo para hacer esa miel tan rica que preparaba tu abuela para el invierno. El serbal ya no adorna los senderos con sus pequeños frutos rojos y su magia. No recuerdo cuando vi por última vez un abedul, con su hermosa corteza pálida moteada. Y el tejo... estaba aquí mucho antes que nosotros, pero lo hemos hecho desaparecer

Las mañanas eran húmedas, los días eran calentados por un sol suave, la lluvia era fina y constante y las noches cada vez más frías. Pero ahora todo es distinto...

- ¿Y que podemos hacer abuelo? Me gustaría poder ver ese bosque del que hablas!!

Su mirada, entonces, pareció cambiar. Seguía siendo triste, pero a la vez había en sus ojos un hilo de esperanza, un pequeño brillo en el fondo de sus pupilas.

- Verás, hay muchas maneras en que podemos ayudar. - dijo mientras su mirada se perdía entre las llamas - Recoger semillas de plantas autóctonas para recuperarlas, no cortar las especies que nos benefician cuando se limpien los caminos y los campos, mantener zonas verdes con flores para que las abejas puedan seguir recolectando y haciendo su miel o tratar de suprimir o limitar el uso de químicos en los cultivos. Pero, lo más importante, mi pequeña, lo acabas de hacer ahora tu sola. Interesándote por ello. Preguntándome que podemos hacer. Siendo consciente de que, realmente, es necesario hacer algo. Ese cambio aún es posible. Está en vuestras manos. Porque solo así se conseguirá detener y, quien sabe si algún día, volver a disfrutar y vivir todo aquello que yo he vivido. A mi, desde luego, me haría muy feliz.

Hace ya algunos años desde que, junto a un fuego muy similar al que ahora arde a mi lado, mi abuelo y yo mantuviésemos esa conversación. Desde mi ventana puedo ver el continuo ir y venir de las abejas que, incansables, aprovechan las últimas horas de luz entre las matas de lavanda del jardín. Escucho el viento, meciendo las ramas de los abedules un poco mas allá y, mientras lo hago, cuento los días que faltan para que el camino hasta la casa se cubra de nuevo de los distintos tonos de verde y marrón cuando robles y castaños comiencen a perder sus hojas de nuevo y, entre párrafo y párrafo, saboreo una de las deliciosas manzanas para las que mi abuelo no tenía ningún secreto. Simplemente... ES POSIBLE. Yo quiero ver ese bosque, quiero ver ese otoño...Feliz Mabon, Feliz Equinoccio de Otoño!!

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